-¿Le dije que estaba saliendo con un chico marroquí?
-sí y que te ibas de vacaciones a Marruecos con él.
-Pues al volver me dijo que ahora ya me había demostrado que me quería, me había llevado a conocer a su familia y ahora tengo que demostrarle yo lo mismo. Tengo que cambiar. No me debo cortar el pelo, no tengo que tener tantos amigos. No puedo ser tan risueña, he de estudiar el Corán y más adelante me tengo que poner el pañuelo. ¿Qué le parece? Me acordé de lo que Ud. me dijo aquel dia, que la violéncia no es sólo que te peguen.
-Ay Jenny! que mal rollo, y ¿tú que le has dicho?
-pues que yo soy como soy y si me quiere tiene que ser así. Pero es que además yo ya no lo quiero porque eso que me ha propuesto me parece insultante. Ah! y le he dicho que el pañuelo se lo ponga él!
Cuscús rápido de cordero
Hace 2 semanas
2 comentaris:
Ole, ole y ole. Asi se dice y asi se hace, cortar por lo sano en cuanto se aprecie cualquier acto de violencia tanto fisica como mental.
¡Ay! Maria, si todas las mujeres estuvieran alertas al primer indicio de violencia, cuantas estarían con vida ahora.
Un beso
¡Ole por Jenny! ¡Ojalá todas esas proposiciones se contemplaran como lo que son, otra forma de agresión! Mutilar una parte de ti, que es tu caracter... ¿No es otra forma de violencia? Pero viene tan bien disfrazadita... "te quiero tanto pero tienes que hacer esto y esto y esto..." que algunas no llegan a darse cuenta. Saludos
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